Portada » Blog y noticias » ¿Cómo contabilizar un Leasing?
Para comenzar, haremos un pequeño resumen de lo que es un Leasing. El Leasing, es un tipo de arrendamiento financiero de bienes inmuebles o de capital, a través de un contrato, mediante el cual una compañía adquiere un bien y lo arrienda, con o sin opción de compra, por un periodo de tiempo establecido, pactándolo en un número de cuotas, un monto y una periodicidad de pago conveniente para ambas partes.
De acuerdo con lo que establece el Boletín N°22 del Colegio de Contadores, con relación a la contabilización de un leasing, se debía hacer una distinción entre Leasing Financiero o Leasing Operativo, de acuerdo con lo estipulado en la NIC 17 (Norma Internacional de Contabilidad) que dio una directriz para el manejo contable de los arrendamientos. No obstante, esta fue derogada por la NIIF16 (Norma Internacional de Información Financiera) que elimina la diferenciación entre arriendos financieros y operativos, estableciendo un modelo único de arrendamiento en el que se reconocen todos los alquileres en el balance (más activos y pasivos) como compras financiadas, con excepciones limitadas para los arrendamientos a corto plazo y los arrendamientos de activos de bajo valor.
La contabilización del contrato de leasing financiero se ejecuta de manera similar a la adquisición de un bien del activo fijo, contabilizando el valor actual del contrato en una cuenta de activo fijo denominada “activos en leasing”, descontando el valor de las cuotas periódicas y de la operación de compra a la tasa de interés apropiada en dichas circunstancias. Para ello debe tomarse en cuenta lo siguiente:
Se debe emplear la tasa de interés que esté explícita en el contrato, a no ser que sea inferior a la tasa promedio de mercado en vigencia durante el periodo en que se firmó, para las colocaciones a largo plazo en condiciones similares a las del contrato de leasing (plazos, monedas o unidad crediticia – pesos, dólares, UF, etc.) en cuyo caso, deberá considerarse esta última.
Si el valor actual de la tasa del contrato excede el precio del bien, deberá emplearse este valor.
Si el contrato no contempla una tasa de interés explícita, se debe contemplar la tasa de interés implícita del mismo, la que es calculada según el precio contado del bien objeto del contrato, si ésta es inferior a la tasa promedio de mercado vigente, tendrá que tomarse dicha tasa como referencia.
El arrendatario debe considerar el bien adquirido como un activo y un pasivo.
El canon mensual de arrendamiento se debe dividir en abono a capital y en gasto financiero.
Se debe contabilizar el valor nominal del contrato como pasivo exigible, el cual debe presentarse, ya sea a corto o largo plazo, según el vencimiento de las cuotas.
Contabilizar la diferencia entre el valor nominal y el valor actual del contrato con cargo a los intereses diferidos por leasing, como una deducción del pasivo exigible, separando, según corresponda, entre corto y largo plazo.
Al momento del vencimiento de cada cuota, se debe traspasar a resultados la proporción de intereses diferidos por leasing devengados hasta la fecha, los cuales estarán determinados a base del saldo
En el proceso de preparación de los estados financieros, se deben reconocer los intereses devengados entre el último vencimiento de la cuota y su fecha de cierre.
La contabilización, en el caso del arrendador, debe ejecutarse como si se tratara de la venta de un bien del activo fijo, anexando a los estados financieros una nota explicativa del contrato.
En este punto debe hacerse una diferenciación entre:
Arrendadores que no clasifican entre fabricantes ni distribuidores y que su actividad es únicamente el leasing.
Arrendadores fabricantes y distribuidores de los productos que ofrecen vía leasing.
En ambos casos, los arrendadores deberán determinar el valor actual del contrato en términos similares a los arrendatarios.
Cabe señalar que, si no son fabricantes ni distribuidores, deben contabilizar el valor nominal del contrato en la cuenta de activo “deudores por leasing”, abonando al bien objeto de la operación y el saldo a una cuenta del pasivo “intereses diferidos por percibir”.
Debe tenerse en cuenta que, si el valor actual del contrato es significativamente inferior al valor determinado en los libros del bien entregado en leasing, la diferencia debe contabilizarse con cargo a la cuenta de pérdidas por financiamiento.
La contabilización operada por el arrendador es similar a la del arrendatario, pero de manera inversa. En lugar de gastos es ingreso, en vez de IVA descontable es IVA generado y en lugar de amortizar el pasivo, amortiza el activo.
En el caso del arrendatario en el leasing operativo, la contabilización debe contemplar los arriendos devengados en una cuenta de resultados operacionales añadiendo la respectiva nota explicativa a los estados financieros y cuando sea el caso, activar como gasto diferido los arriendos pagados anticipadamente y amortizarlos en la medida que se vayan devengando.
En este caso, deben contabilizarse los arriendos devengados en una cuenta de resultados operacionales, anexando la nota explicativa a los estados financieros. Asimismo, y cuando sea el caso, deben contabilizarse como pasivo transitorio, los arriendos percibidos por anticipado y traspasar los resultados operacionales, a una cuenta de ingresos diferidos a medida que se vayan devengando.
En Bridge Financial Group, estamos a tu disposición para asesorarte en todo lo que necesites saber y brindarte las mejores soluciones financieras que permitan la operatividad continua, el crecimiento y desarrollo de tu empresa.
Contáctate con nosotros, tenemos una gran experiencia para ayudarte de forma rápida, cercana y eficiente. Conoce nuestros servicios de Leasing y Factoring.
Revisa nuestros contenidos destacados.